Esta fue la semana del saludo, me puse de tarea saludar a todos. Confieso que un día, como decía Mamibeba; “No me sentía tan gallardo”, no cumplí y lo extrañe.
La gente, en general, se sorprende y responde al saludo y, las más, con una sonrisa. A cuanta gente hice sonreír con algo tan sencillo y gratis.
¿Has visto como cambian su trato cuando los tratas amablemente? Que poderosa es la amabilidad.