Si estas derrotado, entonces no estas fracasado, porque le estás intentando.
Cando nos enamorarnos es cuando más derrotas recibimos. Ahí se pierden muchas batallas, y es perdiendo cuando más ganamos. Como nos decía algún tío en nuestra juventud: «Si ya se enamoro, ya perdió».
Vamos a seguir luchando, a seguir perdiendo, a seguir levantándonos y a seguir disfrutando los triunfos. De una vez.
Yo soy el responsable de mí.