Cumpliéndole a nuestros viejos, 1 de 4

Mi objetivo es mejorar, yo contra mí.

Por gratitud, por aprovechamiento, por justicia divina y por beneficio propio, debemos aquilatar a nuestros adultos mayores. Son nuestro pasado y, en algunos casos, ahora dependen de nosotros.

Solamente algunos afortunados logran pagarle en vida y en directo, todo lo que les dieron sus padres desde la concepción, para regresárselos con el cuidado de ellos, en la vejez.

Y no solamente a los Padres, puede ser algún Tío, exprofesor, excompañero de trabajo. ¿Conoces algún viejit@ con necesidades?

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